El Sarcófago de Perséfone, donde descansan los restos de Carlomagno. (wikimedia commons)La mandó construir Carlomagno, en el siglo VIII, y es la catedral más antigua del norte de Europa. Durante siglos fue el edificio más alto y ostentoso del imperio Carolingio.
En el año 1978 formó parte de los 12 primeros lugares que la UNESCO declaraba como Patrimonio de la Humanidad.
Centro de peregrinación, la Catedral de Aquisgrán (Aachener Dom en Alemán o Cathédrale d’Aix-la-Chapelle en Francés), conserva los restos de su fundador, Carlomagno, que convirtió esta ciudad en la capital de su imperio.
El Sarcófago de Perséfone, donde descansan los restos de Carlomagno. (wikimedia commons)
Carlomagno visto por Durero (wikimedia commons)Para el gran emperador Carlomagno (Carlos I, el Grande – 742/814), la elección de Aquisgran (Aachen) como centro de su imperio, fue fácil, se encontraba en el centro geográfico del mismo, cerca de sus tierras patrimoniales y contaba con aguas termales, conocidas y utilizadas desde los tiempos de los romanos.
Por ello mandó contruir un gran complejo palaciego y, en su interior, ordenó la construcción de una iglesia para su uso particular. En esa iglesia, de planta octogonal, se guardó una reliquia de la capa de San Martín (capella en latín). Debido a ese motivo la iglesia empezó a conocerse como la “capella”, dando origen de esa forma a las expresiones posteriores de “Capilla Palatina” o el más común “Capilla”.
Carlomagno visto por Durero (wikimedia commons)
La construcción de la “Capilla Palatina de Carlomagno” fue iniciada en el año 790 y finalizaría, consagrada por el Papa León III, en el año 805, de la mano del arquitecto franco Eudes de Metz y con la colaboración de numerosos artesanos procedentes de Italia y del Imperio Bizantino.
El edificio está inspirado en la iglesia bizantina de San Vital de Rávena mandada construir por el emperador Justiniano I en el siglo VI, al cual, Carlomagno, admiraba profundamente.
Como una expresión del ideal imperial de Carlomagno, la capilla fue decorada con suntuosos mosaicos, mármoles y bronces e incluso columnas, que fueron expoliadas de edificios de las viejas capitales imperiales: las ciudades de Rávena y Roma. Como resultado de este conglomerado se obtuvo una mezcla de estilos clásico, bizantino y franco-germánico.
Vista interior de la capilla palatina (wikimedia commons)La Capilla Palatina es un edificio de dos plantas coronado por una cúpula. Su planta, como corresponde a un edificio destinado a albergar una importante reliquia religiosa en su interior, es una planta centralizada, formada por un octógono circundado por un hexadecágono. Entre ambos polígonos se forma un deambulatorio, delimitado por columnas.
Carlomagno, a su muerte en el 814 fue enterrado en su interior y, según un relato posterior, narrado por Oto de Lomello, conde del Palacio de Aquisgrán en época de Otón III, indicaría que él y el emperador Otón habían descubierto la tumba de Carlomagno; estos dos hombres sentaron al emperador en un trono, le vistieron con una corona y un cetro de celebración y cubrieron con ostentosas ropas su cuerpo incorrupto. En 1165, el emperador Federico I abrió de nuevo la tumba y trasladó el cuerpo a un sarcófago que emplazó debajo del suelo de la catedral. En 1215, Federico II volvería a introducirle en un ataúd de oro y plata.
Vista interior de la capilla palatina (wikimedia commons)
Con los años, los emperadores francos dejarían de utilizar Aquisgrán como residencia, sobreviviendo únicamente la capilla de todo el complejo palaciego.
Sucesivas adiciones, a lo largo de los siglos, en torno a la Capilla originaria configurarían la actual Catedral de Aquisgrán.
Hasta el siglo XVI la Capilla sería utilizada como el lugar tradicional de coronación de los emperadores del Sacro Imperio Romano Germánico, que se consideraban sucesores de Carlomagno, llegando a ser coronados hasta un total de 30. Por ese motivo la Catedral recibe también el nombre de Kaiserdom (Catedral Imperial).
Durante la ocupación francesa, en las Guerras Napoleónicas, las columnas originales fueron expoliadas y llevadas a París. Algunas de ellas fueron recuperadas, pero la gran mayoría debieron ser reconstruidas totalmente a partir de 1840, utilizándose para ello granito de Asuán.
El Cofre de María (wikimedia commons)En su interior se encuentra, además, el llamado “Cofre de María”, en el cual se encuentran las “grandes reliquias de Aquisgrán”: los paños de Jesucristo, el vestido de la Virgen María y el paño de la decapitación de San Juan Bautista.
Debido a las importantes donaciones efectuadas por los distintos emperadores que en ella fueron coronados, o por las distintas obras realizadas para tales actos, también podremos deleitarnos con la contemplación de numerosos tesoros, en oro, plata y piedras preciosas, en la “Cámara del Tesoro”.
Ocupando una superficie de más de 600 m² y en diferentes niveles y salas, la cámara del tesoro muestra más de 100 importantes obras de arte sagradas de la Antigüedad, del periodo carolingio, otoniano, staufer y gótico. Entre las extraordinarias obras de arte se encuentran la ricamente adornada sítula de marfil (vasija de la Edad de Bronce), la Cruz de Lothar tachonada de piedras presiosas y el busto de Carlomagno parcialmente cubierto de oro con las reliquias craneales de Carlomagno así como el relicario de Carlos (siglo XIV) y el relicario de tres torres con su lujosa arquitectura de doseles.
El Cofre de María (wikimedia commons)
Vista panorámica de Aachen (Aquisgrán) (wikimedia commons)