La ciudad de Dresden tiene un gran patrimonio cultural. Es conocida su belleza arquitectónica con edificios de estilo barroco. Buena parte de este patrimonio fue destruido durante la segunda guerra mundial, sin embargo, los trabajos de reconstrucción han permitido recuperar los monumentos más emblemáticos de la ciudad.
Entre los lugares que podemos conocer, está el Complejo Zwinger o la Ronda, donde se hacían fiestas en las épocas cortesanas. Su patio es rectangular con cuatro jardines. Mientras que en su interior podemos ver obras de arte, entre las más conocidas están “La Madona Sixtina”, de Rafael, “La Venus” por Giorgione y “El Rapto de Gaminedes”, obra de Rembrandt, entre otras.
La iglesia de la Corte, es la más grande de su región, tiene en su torre un campanario. Aquí están las tumbas de antiguos soberanos de la ciudad. El Albertinum, es uno de los museos más importantes de la ciudad, aquí se exponen obras de la familia Real, además de patrimonio de ellos. En la bóveda verde, podemos ver colecciones de joyas reales, y es la más importante de toda Europa, aquí podremos apreciar tesoros preciosos. Otro lugar imperdible, es la pomposa ópera Semper, con una soberbia decoración y bellos murales, donde han estado artistas como Wagner y Richard Strauss. Frauenkirche o la Iglesia de nuestra Señora es conocida como símbolo de la guerra, que sufrió el bombardeo de la guerra mundial y fue reconstruida tiempo después. Vale la pena visitar Pfunds Molkerei que es considerada la lechería más bella del mundo, con degustaciones y ofertas de queso. Por último podemos disfrutar de la hermosa vista del río Elba y de sus puentes.