Una de las zonas más apreciadas del esquí de fondo en Alemania del norte es el Parque Nacional del Harz. El lugar, además, es un destino encantado para excursionistas que andan en busca de páramos, corrientes acuáticas y atravesar bosques.
Este parque, ofrece un espacio diferente para gozar de la naturaleza y olvidarse por completo del alboroto. Este lugar, gigante por demás, protege desde inicios de la década de los noventa el Brocken y otras zonas centrales de la Sierra del Harz en los Länder de Baja Sajonia y Sajonia-Anhalt, desde Altenau en el oeste y Bad-Harzburg e Ilsenburg en el Norte hasta Drei-Annen-Hohne en el Este y Herzberg en el Harz meridional.
Pero son los bosques el corazón de este espacio, ideal los caminantes que disfrutan adentrarse entre árboles y explorar todo lo que la naturaleza pone a su alcance para disfrutar. Una de las opciones dentro del parque es la llamada Ruta de Goethe o “Hexenstieg”, que se entiende como la “subida de las Brujas”. Es un recorrido completo en el que se atraviesan bosques, páramos y corrientes acuáticas de origen natural, lo que se convierte en un hábitat perfecto para animales y plantas.
Una de las maravillas que se puede apreciar en este espacio es el Brocken, un pico con 1.142 metros de altura, lo que lo convierte en el pico más alto del Norte de Alemania. El Brocken es el protagonista de un sinnúmero de historias de brujas debido a que la cima con frecuencia se puede ver escondida entre la niebla. Estos cuentos generalmente se disfrutan en la Noche de Walpurgi que se desarrolla cada año.
Algunas de las especies propias de esta zona son los venados, corzos y jabalíes. Además de la presencia de una cantidad de aves entre las que se pueden contar pitos negros, mirlos capiblancos o chochines, además de algunos gatos salvajes y linces.