Barcelona cuenta con importantes zonas verdes en las que descansar y desconectar del ritmo de la ciudad. El Parque de la Ciudatella es, quizás, uno de los más importantes y de mayor extensión de la ciudad. Reúne zonas verdes e importantes edificios institucionales, además de museos y el popular zoo.
Construido en la segunda mitad del siglo XIX, su trazado original se transformó y se adaptó para la Exposición Universal de 1888 que vislumbró una nueva Barcelona. De los edificios que se construyeron con motivo de esta exposición se conserva el que se destinó a restaurante, obra de Domenech i Muntaner, que fue llamado el Castell dels Tres Dragons y que ahora lo ocupa el Museo de Zoología.
El parque tiene una extensión de 17,42 ha y es el lugar perfecto para hacer deporte, pasear, ir de picnic y comer al aire libre, y visitar algunos monumentos. Cuenta con un magnífico lago en el que poder navegar en pequeñas barcas a remo, cascadas, áreas públicas y una estatua emblema del parque: un gran mamut que recuerda que muy cerca se encuentra el zoo.
Al igual que en otras zonas verdes de grandes ciudades, los edificios públicos e históricos se emplazan en este bonito parque. No en vano, encontramos el Parlamento de Cataluña, el edificio donde se aprueban las Leyes de la Comunidad y, que, muchas veces, puede ser visitado por los ciudadanos.
El parque también alberga el Museo de Zoología, el Museo de Geología, el Invernadero y Umbráculo (donde se realizan conciertos al aire libre), el Zoológico (que pronto va a ser trasladado y ampliado a una nueva ubicación), el Instituto de Escuela Secundaria IES Verdaguer, la capilla castrense, el parque infantil de tráfico, y un sinfín de áreas para los más pequeños.
Que bonica que és la meva capital i el parc de la Ciutadella
meravellos
mercè 4/05/2009 @ 7:34 PM
