El Gran Buda de Lesha es la estatua esculpida en piedra de Buda más alta del mundo. Fue construida durante la dinastía Tang. En 1996, la Unesco la nombró Patrimonio de la Humanidad junto con el paisaje panorámico del monte Emei.
Esta estatua está tallada en un acantilado donde se unen los ríos Min Jiang, Dadu y Qingyi, en la parte sur de la provincia china de Sichuan, cerca de la ciudad de Leshan. La escultura está frente al monte Emei mientras el agua de los ríos corre por los pies de Buda.
Tiene una altura de 71 metros, representa a un Buda Maitreya con las manos apoyadas sobre las rodillas. Los hombros miden 28 metros de ancho y el más pequeño de los dedos del pie es tan grande que puede albergar a una persona sentada en él. Un dicho local dice: La montaña es Buda y Buda es la montaña. El origen de esta frase está en el hecho de que la montaña en la que se encuentra el gran Buda (vista desde el río) tiene una silueta que recuerda a un Buda tumbado.
Los monjes al colocar al Buda en ese lugar esperaban calmar a las aguas turbulentas que destrozaban los barcos que navegaban por el río. La estatua fue completada por sus discípulos 90 años más tarde. Parece ser que los restos de roca resultantes de la construcción se fueron depositando en el río lo que alteró la corriente, convirtiéndola en más segura para la navegación.