Todo el mundo conocer de la constancia que tiene una u otra persona cuando se trata de mantener sus principios, más aún cuando hablamos de una fé religiosa, ya que muchos monjes tienen puesta su fortaleza de cada acción en la fé a sus principios religiosos.
Si alguien se encuentra visitando China y se encuentra por los alrededores de la provincia de Qinghai, especificamente al oeste del pais, debe de aprovechar la oportunidad de visitar el hogar del monje Hua Chi, mismo que al contar su historia seguro que sus visitantes quedarán asombrados de lo que la fé puede llegar a hacer.
Pero esto no es algo del otro mundo, sino más bien una evidencia de constancia y perseverancia, ya que en éste lugar se encuentra un madero donde han quedado marcadas las huellas de éste monje que, a lo largo de toda su vida se ha dedicado a la oración, momentos que para una persona común y corriente podrían ser interminables al conocer esta historia.
Es así que el madero tiene muy bien definidas las huellas de los pies del monje, quien asegura que ha pasado orando 2000 veces al día desde que era muy jóven, pero que en la actualidad lo hace apenas 1000 veces al día y en épocas de inmenso frío apenas como 500 veces al día.
Todo esto, para aquellos que no lo podrían creer, se encuentra confirmado ya que el madero mantien fielmente cada instancia de éste monje en sus momentos de oración.