Esta obra en bruto, o casi, es una de las más importantes que se han podido encontrar a manera de descubrimientos enterrados, ya que muestra e indica la gran capacidad del control que tenían los egipcios al momento de construir sus edificaciones, pues como todo a lo que ellos estaban acostumbrados en cuando a sus creaciones monumentales, lo manejaban siempre al más alto nivel.
Es así que podemos ver un obelisco, mismo que fue descubierto en la cantera norte de Asuán y que, ante el asombro de muchas personas, se puede uno imaginar que fuerza es la que se necesitaría para poder mover un poco de éste obelisco, mismo que tiene un peso aproximado de 1216 toneladas, y que mide como 42 metros de largo.
Se lo conoce como el Obelisco inacabado debido a que, al parecer nunca se termino de tallarlo por completo, ya que se puede ver que aún se encuentra unida a la piedra original, muestra de que faltó mucho trabajo por realizar en el mismo. Esto hace inevitablemente que Asuán se haya convertido en un destino turístico, por la importancia que le amerita dicho descubrimiento.
Es así que, al tener Asuán más visitas que deseen apreciar dicha obra, se han implementado alrededor del obelisco, determinados senderos a manera de pequeñas calles para que las personas que deseen verlo más de cerca, puedan hacerlo con mayor comodidad, pudiendo con esto el visitante, valorar y apreciar la magnitud que implica toda una obra en el estilo de los egipcios.
El obelisco, llamado Tejen en la lengua de los antiguos egipcios, el termino es sinónimo de “protección”. Representa una ofrenda a la fuerza vivificante de Dios, destacada en el disco solar, Ra, y el piramidón simboliza los rayos del sol y tiene por función simbólica perforar el cielo Nut, nuestra madre Eva, dispersar las fuerzas negativas que siempre amenazan con acumularse, bajo la forma de tormentas visibles o invisibles, por encima del templo y sustituir a la pirámide, considerada como imagen de la colina primordial que surgió del océano primigenio y sobre la cual se inició la creación del mundo.
Cuenta la leyenda que Set dio muerte a su hermano Osiris y dividió su cuerpo en catorce partes, que fueron dispersadas por todo Egipto, excepto una que fue ocultada. Isis, esposa de Osiris y señora de la magia, la belleza y la fertilidad, se encargó de buscar todas las partes y las unió con su magia, cayendo finalmente en cuenta que, al faltarle una parte de su amado, le era imposible completar el cuerpo de Osiris para tener un hijo con él. En tal circunstancia, Isis convirtió a Osiris en obelisco y ella se transformó en halcón hembra que, al posarse sobre el piramidón, quedó embarazada de Horus.
En la cantera de Asuán se encuentra aún el famoso “obelisco inacabado”, una mole de granito aproximadamente de 42 m. de altura, que la reina Hatshepsut pensaba presentar al pueblo como el obelisco más alto del imperio, asimilándose así a Isis. Pero, unas cuantas grietas aparecieron en el obelisco al separarlo de la cantera, deteniendo la terminación de esta obra, lo cual va permitiendo a los egiptólogos reconstruir el proceso de elaboración de los obeliscos.
Samir Hiweg, guía turístico de habla hispana.
SAMIR HIWEG 5/10/2009 @ 3:01 AM