Museo del Louvre al atardecerEl museo del “Louvre” es, sin duda, el museo más famoso del mundo e imprescindible en cualquier guía de París.
Fue el precedente y el ejemplo a seguir por la mayoría de los grandes museos nacionales que existen hoy en todo el mundo.
Con sus más de 15 millones de visitantes en el año 2008 es, con diferencia, el museo de arte más visitado de todo el planeta.
Restos del antiguo Castillo del LouvreSu apertura se realizó en el año 1793 y es el resultado de un impresionante esfuerzo histórico de largos siglos de espíritu coleccionista, desde los monarcas galos, hasta los protagonistas de la “Ilustración”, pasando por la gran labor de desamortización llevada a cabo durante la “Revolución Francesa”.
Su apertura significó que las grandes colecciones privadas, en manos hasta entonces de las familias aristóctratas y reales, o de la Iglesia, se pudiesen exponer en un lugar público para el disfrute del conjunto de la sociedad. Ello sirvió de ejemplo para muchos otros países que pusieron en práctica el sistema seguido por los franceses para poder exhibir su rico patrimonio artístico y cultural.
Museo del Louvre al atardecer
Restos del antiguo Castillo del Louvre
La historia del edificio también tiene su singularidad, ya que proviene de un castillo construido en el siglo XII, el Castillo del Louvre. Más tarde sería embellcido con decoraciones renacentistas y fue Carlos V, el primero en reunir en él, convertido ya en Palacio Real, sus colecciones artísticas.
Posteriormente Francisco I y Enrique II realizaron algunas reformas para convertirlo en un auténtico palacio renacentista.
Una de las múltiples salas interiores del museoFinalmente, su aspecto actual, se lo conferiría el proyecto de Catalina de Médicis, continuado por Enrique VI, después de las guerras de la religión, a finales del siglo XVI. Enrique VI era calvinista, pero para acceder al trono tuvo que abdicar de su fe, pasándose al catolicismo, al menos en apariencia, suya es la famosa frase “París bien vale una misa”. Fue el primer monarca de la dinastía Borbón en ocupar el trono de Francia.
Una de las múltiples salas interiores del museo
La construcción del Palacio de Versalles por parte de Luis XIV, a finales del siglo XVII, produciría el abandono del Louvre por parte de la familia real y que, a partir de principios del siglo siguiente, empezase a convertirse en un centro de cultura, al albergar en su interior las distintas Academias Francesas. En el edificio empezaron pronto a celebrarse las exposiciones anuales de la Real Academia de Pintura y Escultura.
El interior de la pirámide de cristalDespués de la Revolución Francesa y la abolición de la monarquía, por decreto de mayo de 1791, el Louvre sería destinado a funciones artísticas y científicas y, al año siguiente, se concentrarían en el Palacio las colecciones de la corona.
Parte del palacio se abriría al público el 8 de noviembre de 1793, para mostrar sus colecciones, siendo lo más novedoso de la medida que se nacionalizaban bienes de propiedad real, y que el acceso era libre pues no se limitaba al público culto ni se regulaba mediante visitas concertadas, como sí ocurría en los Uffizi y en el Museo del Prado durante sus primeros años.
El interior de la pirámide de cristal
El edifico del Palacio del Louvre estaba unido físicamente al Palais des Tuilleries (Palacio de las Tejerías), el cual fue destruido por un incendio durante los hechos de la Comuna de París, en 1871.
Los tesoros artísticos que contenía dicho palacio se perderían durante el incendio y sus restos fueron demolidos, dejando paso a la enorme explanada actual que hay frente al Louvre
En la década de los 80 fue sometido a una ambiciosa restauración, cuyo símbolo más visible y popular es la “Pirámide de Cristal”, por la que, el público y los visitantes, descienden a un recibidor subterráneo que da acceso a las diversas alas del museo. La pirámide fue diseñada por el arquitecto Ieoh Ming Pei e inaugurada en 1989.
A pesar de la remodelación, no ha sido hasta fechas recientes, que se han terminado de desalojar todas las instalaciones de organismos oficiales, para abrir nuevas salas, como la dedicada al arte del Islam, inaugurada en 2008.
El Louvre visto desde el Palacio de Orsai, al otro lado del Sena
El Louvre visto desde el Palacio de Orsai, al otro lado del Sena