En el centro de la concurrida Plaza de la Independencia se encuentra uno de los más conocidos baluartes de Madrid, la Puerta de Alcalá, misma que ocupa un lugar muy importante dentro de los tesoros de la ciudad.
En 1764 el rey Carlos III delegó al arquitecto italiano Sabatini, para que se hiciese cargo de la construcción de una gran puerta que sustituya a una pequeña puerta barroca siglo XVI, misma que fue construida por el Rey de Felipe III. Carlos III ideó la puerta como el límite Este de la ciudad, pero ésta era demasiado pequeña para que fuese una importante puerta de entrada a Aragón, a lo que se requirió de nuevas alternativas que ayuden a desarrollar la nueva puerta.
El diseñador Sabatini fue llamado para elaborar un esquema de una puerta neoclásica de granito, con tres arcos grandes y dos pequeños, además de la posibilidad de que contengan pasillos rectangulares. Es así que cada uno de los arcos está adornado con una cabeza de león, mismas que fueron esculpidas por Roberto Michel. La parte superior de la puerta está adornada en cambio con estatuas de Francisco Gutiérrez.
La construcción de la puerta tomó alrededor de 9 años, misma que fue finalmente terminada en 1778 en su totalidad. La puerta pronto se convirtió en uno de los símbolos de Madrid, siendo un motivo de visita por parte de turistas locales y extranjeros. Ahora es clasificado como un Monumento Nacional, valor por demás bien merecido y que junto a otros Monumentos de España tienen un valor transcendental.
En el siglo 19, la Puerta de Alcalá se trasladó a su actual ubicación en la Plaza de la Independencia, junto al Parque del Buen Retiro, de Madrid situado en el centro del parque.
Muchas gracias, yo vivía muy cerca de la puerta de alcañá, en madrid. Que recuerdos…
fondos gratis 11/08/2009 @ 9:44 PM